Ciudad de México – México acoge a muchos españoles cualificados que huyen de la crisis con la esperanza de hallar un mejor futuro en este país, cuyas perspectivas económicas son positivas a pesar de la desaceleración global. Hoy ingenieros, licenciados en administración de empresas, periodistas, técnicos de sonido o publicistas están saliendo de España en búsqueda de oportunidades laborales y México se ha convertido en un buen destino para ellos.
En el primer semestre de este año unos 1.031 españoles obtuvieron permiso de trabajo en México, el documento conocido como FM3, un 34,6 por ciento más con respecto al mismo periodo del año anterior, según cifras del Instituto Nacional de Migración (INM). De acuerdo con la empresa de trabajo OCC, uno de los buscadores más importantes del país, mientras que en todo 2011 se añadieron a su base de datos 514 solicitudes de empleo de españoles, en este 2012 y solo hasta julio ya hay 674.
En opinión de Fernando Calderón, director relaciones públicas de OCC, el mercado laboral mexicano es muy atractivo porque está en constante movimiento en un país donde el sector empresarial mantiene un gran dinamismo, reflejado en el crecimiento económico. La economía mexicana aumentó un 4,3 % en el primer semestre de 2012 respecto al mismo período del año anterior, aunque se prevé una ligera desaceleración en la segunda mitad del año para cerrar en torno al 4 por ciento.
La tasa de desempleo bajó en México a 4,8 % de la población activa en el segundo trimestre del año respecto al mismo periodo de 2011, cuando se situó en 5,2 %, mientras que en España subió al 24,6 %, una cifra que se eleva al 53 % entre los jóvenes. Aunque a muchos españoles en principio no les compense instalarse en México por el tipo de cambio euro-peso, ante la falta de empleo en España “es mejor tener que no tener”, dijo Calderón.
Los sectores en los que más trabajo buscan los españoles son en publicidad y comunicación, seguidos de ingeniería y administración de empresas. Quince días es lo que le costó a Rodrigo Gil, vallisoletano de 24 años especialista en sonido, encontrar un trabajo en una de las compañías más importantes de este sector. “Aquí hay poca gente que estudie esto y mucho trabajo y en España es al revés”, dijo el joven, quien en septiembre pasado decidió hacer su maleta y partir hacia México después de tres meses en paro.
Antes de viajar mandó currículos por internet y al llegar sostuvo entrevistas con los interesados hasta que se decidió por su actual empresa, donde gana un salario que le da para vivir bien e incluso para ahorrar y comprar material para un día trabajar por su cuenta. Cuando decidió emigrar de España, pensó también en Londres, por aprender un idioma, pero lo descartó porque es un lugar mucho más caro en el que difícilmente habría encontrado trabajo en su campo.
“Tengo muchos amigos que se han ido a Londres y están trabajando de camareros y eso no quiero, prefería buscar de lo mío”, comentó Rodrigo, que planea estar fuera de España al menos cinco o seis años, hasta que amaine un poco el temporal. Según cifras del Instituto Nacional de Estadística español del 2011, en México residen 86.658 españoles, un dato que es inferior al real dado que muchos ciudadanos no se registran en las oficinas consulares.
A diferencia de otros países en los que hay más restricciones, cuando un español llega a México tiene permiso como turista hasta por seis meses y una vez aquí puede buscar trabajo e iniciar los permisos correspondientes. “Cuando llegué a España jamás pensé que iba a haber tantísima gente sin empleo (…) ni tantos españoles muy bien cualificados buscando trabajo fuera a cualquier precio”, dijo a Efe Natalia Acevedo, argentina española de 34 años.
Ante la crisis argentina, hace diez años regresó a España para estudiar un máster y trabajar, hasta que en noviembre pasado recibió una oferta de una empresa catalana para que llevara su negocio de mercadotecnia digital a México, un país al que no le costó adaptarse y en el que hay unas 4.500 compañías españolas. “Y eso que todo lo que llega de México (a través de las noticias) son los problemas de drogas, muertes, inseguridad (…) Sin embargo, cuando estás aquí te puedes mover sin ningún problema, con precaución”, comentó.
Luis Uranga, director de UR Global, una compañía española dedicada a ayudar a las empresas que quieren llevar sus negocios a México y Brasil, está convencido de que salir es la única opción de supervivencia para muchas firmas que lo están pasando mal. “Tienen el camino más difícil que hace unos años, porque hay más competencia y tienen menos recursos, por lo que les está costando más (…), habrá que picar un poco más de piedra, pero en términos generales les va bien a todas”, dijo en entrevista con Efe.
Si antes de la crisis montaban unas 12 empresas al año en los dos países, Brasil y México, ahora son unas 30, sobre todo pequeñas y medianas (pymes). “Sí, definitivamente venir es la solución para no morir”, sentenció Uranga, tanto para las empresas como para los jóvenes que, llenos de ganas, no encuentran opciones en España.